LA PROPUESTA DE REFORMA PENSIONAL DE GUSTAVO PETRO
La propuesta de Petro busca reorientar y fortalecer el "régimen de prima media" en función de ampliar la cobertura de la población protegida mediante prestaciones que repongan en un grado o porcentaje definido los ingresos que pierden los afiliados por causas que puedan sobrevenir a las contingencias de "vejez", "invalidez" y "muerte". También generar condiciones para garantizar una “pensión solidaria” a todos los “adultos mayores” y el acceso a una “pensión básica” a sectores de la población sin remuneración salarial y/o sin posibilidades de generar ingresos en forma independiente.
Javier Cabrera Rivera *
A principios de septiembre, durante el acto de posesión de las directoras del Departamento de Prosperidad Social y del ICBF, el presidente Gustavo Petro tocó puntualmente aspectos relacionados con la reforma pensional que propuso a los colombianos durante la campaña electoral. Dijo que los adultos mayores que hoy no tienen pensión recibirán un “bono” de $500.000 mensuales, o, más preciso, una “mesada” de $500.000. Con esta decisión Petro deja sentado que en adelante todos los “adultos mayores”, que no tienen pensión, un total estimado de 3.000.000 de personas, tendrán derecho a una “pensión solidaria” equivalente al 50% del salario mínimo mensual vigente. Objetivo del “pilar solidario básico” del sistema pensional que se propone implementar el gobierno.
Una mesada de $500.000 representa un incremento sustancial respecto a los $80.000 que reciben en la actualidad los “adultos mayores” beneficiarios del programa “Colombia Mayor” que maneja el Departamento de Prosperidad Social con un costo anual aproximado de un billón de pesos. Recursos, precisó Petro, que deberán pasar a Colpensiones “a la espera de que la reforma pensional irradie recursos al programa de adulto mayor”, algo que será tratado el año entrante cuando el gobierno tramite la reforma pensional ante el Congreso.
También precisó que las mesadas de los adultos mayores sin pensión se pagarán con recursos del presupuesto nacional contando con una disponibilidad de $18 billones anuales, “porque los cotizantes de fondos privados entrarán a Colpensiones un porcentaje de su aporte", refiriéndose a los “nuevos recursos” que entrarán a Colpensiones con las cotizaciones de afiliados a los “fondos privados de pensiones”. Un volumen mayor de recursos pensionales bajo el “régimen de prima media” que podrían mejorar el presupuesto del programa del adulto mayor, sin referirse específicamente a las alternativas para llevar a cabo estas transferencias que serán objeto de estudio, como es de esperarse, con miras a fundamentar la propuesta de reforma pensional que presentará al Congreso en 2023. No es cierto, enfatizó, que para lograr este objetivo se vayan a utilizar los ahorros de los afiliados a los “fondos privados de pensiones”.
Petro hizo esos pronunciamientos a propósito de la posesión de la nueva directora del Departamento de Prosperidad Social. No se refirió, menos sustentó, la reforma pensional como un todo. No era el momento ni las circunstancias para hacerlo. Sin embargo, los más connotados “expertos”, gestores y promotores de los “fondos privados de pensiones”, saltaron a los medios a criticar y plantear sus “preocupaciones” sobre las graves consecuencias que tendrán las propuestas de Petro sobre la sostenibilidad financiera y fiscal del sistema pensional. El cuento de siempre cuando surge una iniciativa con la posibilidad de mejorar condiciones de vida de sectores desprotegidos de la población, en este caso los “adultos mayores” que no tiene soporte de ingreso alguno para enfrentar la vejez o reciben un subsidio de $80.000 mensuales que “ni siquiera les alcanza para quitar el hambre”.
Santiago Montenegro, el tecnócrata que preside Asofondos, aunque no parece estar en contra de una “pensión básica universal a los adultos mayores”, cuestiona a su manera que este tipo de propuestas no se hagan en el marco de una reforma que introduzca “mejoras” al sistema pensional, dando a entender, veladamente, que lo dicho por Petro es un tema aislado, desarticulado de una propuesta de reforma o que la reforma que propone no es la adecuada para viabilizar la pensión básica universal que propone Petro. (1)
La verdad es que la propuesta de una “pensión solidaria” de medio salario mínimo mensual para todos los adultos mayores que no tienen pensión es el objetivo del “pilar solidario básico” que responde a una concepción de reforma integral del actual sistema pensional en procura de beneficiar no solo a los adultos mayores desprotegidos, también generar condiciones para que los trabajadores, según sus posibilidades económicas, puedan aportar al sistema pensional y obtengan en la vejez una pensión que reponga en un grado o porcentaje predeterminado los ingresos percibidos en la etapa productiva. De allí los dos “pilares” restantes de la reforma del sistema pensional que propone el gobierno de Petro: “el pilar contributivo” y el “pilar de ahorro voluntario”.
Al doctor Montenegro también le “preocupa” que propuestas como las de Petro afecten el “ahorro de la gente” y que los trabajadores no cuenten con los recursos necesarios para pensionarse en la vejez. Una manera sutil, propia de un “experto”, de alertar a los afiliados de los “fondos privados” que al ser trasladados a Colpensiones los recursos que ahorraron serían utilizados en el pago las mesadas a los “adultos mayores” que no tienen pensión, no obstante la aclaración de Petro que serán pagadas con recursos del presupuesto nacional, sin descartar que los nuevos aportes de los afiliados a los “fondos privados” que pasan a Colpensiones generen condiciones para contribuir a la financiación del programa de adultos mayores.
Otros “analistas” le ponen cifras a las “preocupaciones” del exdecano de la Facultad de Economía de la Universidad de los Andes. El 92.8% de los afiliados a los fondos privados ganan menos de 4 salarios mínimos mensuales. Solo el 7.2% que supera ese techo seguirán aportando el excedente a los “fondos privados”. Por lo tanto, la casi la totalidad de los recursos ahorrados por los afiliados a los “fondos privados” serán transferidos automáticamente a Colpensiones para pagar las mesadas de los adultos mayores. Un “ingenioso argumento” que conlleva a deducir bajo una lógica distorsionada que estas personas no dispondrán los recursos necesarios para pensionarse cuando lleguen a la vejez. (2)
Pero ahí no termina la cosa. En la línea de análisis de los “expertos” lo más grave, de efectos macroeconómicos catastróficos, es que Petro va acabar con los ahorros de los afiliados a los fondos privados “construido a lo largo de 30 años”, un total de $360 billones en la actualidad, según Santiago Montenegro, que han contribuido a través de inversiones a dinamizar la economía del país. Otro “ingenioso argumento” para desviar la atención y encubrir el fracaso de los “fondos privados” en cuanto cobertura (número de pensionados) y los ínfimos niveles de reposición de ingresos de las “pensiones” que logran los afiliados. En 30 años, de los millones de afiliados que han entregado sus aportes (“ahorros”) a estos organismos, 18 millones al cierre de 2021, solo 247.000 se han pensionado, más del 80% con un salario mínimo mensual y de estos un 90% gracias al “subsidio de garantía de pensión mínima” que se financia con el 1.5% de los aportes de los mismos afiliados en desmedro de la capitalización de sus ahorros. (3)
Desde otra agencia de la tecnoestructura global, Mauricio Santamaría, presidente de ANIF, aunque le parece loable entregar una mesada (no señala el valor) a los adultos mayores en “vulnerabilidad” (estratos 1 y 2 del Sisben) con la autoridad de un “experto” no duda en calificar de “grave error” la manera de implementar y financiar la propuesta de Petro. Y para ser más “gráfico” sostiene que utilizar los $18 billones que cotizan por año los afiliados a los “fondos privados” para financiar la propuesta de Petro significa acabar el “ahorro corriente actual”. Una falacia o una “extraña coincidencia”. La verdad es que en las cuentas de Petro $18 billones valdrían en 2022 una mesada de $500.000 para 3.000.000 de adultos mayores ($500.000 x 3.000.000), sin considerar para nada los $18 billones que supuestamente totalizan las cotizaciones en un año de los afiliados a los “fondos privados de pensiones”.
Pero ahí no termina la cosa. En los cálculos a futuro del distinguido exdocente de la Universidad de los Andes, en 35 años la propuesta de Petro va a generar una deuda adicional a la actual de $580 billones en valor presente neto. Y para colmo de males estos recursos serán administrados bajo el “régimen de prima media” amentando la pobreza y la desigualdad debido a las fallas estructurales que tiene este régimen. Entonces vendrá el caos. El sistema pensional llegará a una situación de insolvencia tal que no se podrá pagar las pensiones a las personas que depositaron sus ahorros durante años para “asegurar una vejez digna”.
Ante el “caos” que se avecina, aunque está dicho que la propuesta de reforma pensional de Petro se presentará el próximo año, los “expertos” al unísono convocan con urgencia al gobierno a un “dialogo técnico”, un “dialogo”, es de suponer, entre gobierno y “expertos”, con la capacidad, según ellos, de discutir una propuesta para la implementación de un sistema pensional que “introduzca mejoras” a los adultos mayores y a los trabajadores de bajos ingresos pero sin poner en riesgo la sostenibilidad financiera y fiscal del sistema. En realidad, lo que busca la tecnocracia es confrontar y disuadir al gobierno en favor de los intereses que representa, la propuesta de la campaña electoral de Petro, hasta ahora solo perfilada, con la propuesta de Asofondos (que es la misma de Duque) y la de Fedesarrollo, que se viene cocinando de tiempo atrás.
Y es que, circunstancialmente, debido al triunfo electoral de Petro, en este momento están sobre la mesa tres propuestas que juegan sus cartas en torno a la reforma del sistema pensional actual. Apoyados en la información disponible, vamos a considerar en los aspectos más relevantes, en qué consiste y qué busca cada una de estas propuestas frente a la problemática pensional que vive el país. Dada la complejidad del tema de análisis por razones metodológicas, “para alivianar el texto”, vamos a dedicar un artículo a cada propuesta. En lo que sigue de este documento se desarrolla la propuesta de Gustavo Petro. En artículos posteriores, publicados también en esta página, se abordan las propuestas de Asofondos y Fedesarrollo.
LA PROPUESTA DE REFORMA PENSIONAL DE GUSTAVO PETRO
En la campaña electoral Petro propuso a los colombianos un sistema pensional conformado por tres “pilares”:
1. “Un pilar solidario básico que garantiza un bono pensional no contributivo equivalente a medio salario mínimo mensual para los hombres y mujeres adultos mayores que hoy día no tienen derecho a la pensión”.
En otras palabras, se trata de establecer una “pensión solidaria” no contributiva, de monto igual al 50% del salario mínimo mensual legal vigente, para todos los “adultos mayores”, hombres y mujeres, que a la edad señalada para obtener el beneficio no cumplan ni puedan cumplir a futuro requisitos de ley para acceder a una “pensión contributiva”. “No contributiva” porque el acceso a la “pensión solidaria” no está condicionado al cumplimiento del requisito de aportes ya sea por porque el potencial beneficiario nunca cotizó a pensión o cotizó en una cantidad o tiempo que haga inoperante seguir cotizando para obtener esta modalidad de pensión.
En pronunciamientos posteriores, ya como presidente, Petro manifestó que esta pensión será financiada con recursos del presupuesto nacional, sin descartar que con las cotizaciones de los afiliados a los “fondos privados de pensiones” que entren al “régimen de prima media”, actualmente administrado por Colpensiones, puedan generar condiciones para transferir recursos al “programa del adulto mayor sin pensión.” Una alternativa a ser evaluada cuando se presente la propuesta de reforma al Congreso de la República el próximo año.
El monto de la “pensión solidaria” este año, 2022, sería de $500.000 mensuales, 50% del salario mínimo mensual ($1.000.000). Se estima que en la actualidad hay 3.000.000 de adultos mayores potencialmente beneficiarios. El costo de la pensión solidaria sería por lo tanto de $1.5 billones mensuales ($500.000 x 3.000.000) y de $18 billones en el año (1,5 billones x 12). En la práctica, sin embargo, estas cifras son ilustrativas porque la reforma pensional del gobierno será presentada el próximo año. En consecuencia, de acuerdo al tiempo que dure la discusión y aprobación de la Ley de reforma pensional en el Congreso, de la regulación sobre su aplicación y del valor del salario mínimo mensual en 2023, dependerá el monto de la “pensión solidaria”, los costos de su implementación y serán definidas las fuentes de los recursos que la financian.
Una mesada de $500.000 en la actualidad, 34% por encima de la “línea se pobreza” que calcula el DANE, $331.000, representa un incremento sustancial frente al subsidio de $80.000 mensuales que reciben hoy los “adultos mayores” de los niveles 1 y 2 del Sisben. Un subsidio, agreguemos, que se cubre con recursos de la “subcuenta de subsistencia” del “Fondo de Solidaridad Pensional” financiada con aportes adicionales de los afiliados que tienen ingresos de cuatro (4) o más salarios mínimos mensuales y pensionados con mesadas superiores a 10 salarios mínimos mensuales. (Artículo 27 de la ley 100/93, modificado por el artículo 8º de la ley 797 de 2003).
2. “Un pilar contributivo obligatorio para todos los trabajadores, incluyendo los de mayores ingresos, que cotizarán a Colpensiones una suma calculada sobre la base de 1 a 4 salarios mínimos mensuales vigentes, lo que asegurará una pensión básica bajo el régimen de prima media. Las personas cuyos ingresos sean superiores a 4 SMLV decidirán libremente dónde cotizar el excedente; en este pilar participarán las Administradoras de Fondos de Pensiones”.
En otras palabras. El sistema pensional que propone Petro establece un “pilar” que se financia con las cotizaciones de los afiliados. De carácter obligatorio para todos los trabajadores que tiene capacidad de pago de la cotización. Sobre un tope de ingresos de 4 salarios mínimos mensuales el destino de la cotización tiene dos alternativas: 1ª) Todos los trabajadores, incluyendo los de altos ingresos, deben cotizar al “régimen de prima media”, actualmente administrado por Colpensiones, 2ª) Los trabajadores con ingresos superiores a 4 salarios mínimos mensuales pueden decidir libremente donde cotizar el excedente. Una alternativa sería hacerlo a los “fondos privados de pensiones”. Estos organismos financieros por lo tanto no desaparecen. Seguirán operando en competencia, ahora sí, entre fondos privados y con otras formas de ahorro pensional.
3. “Un pilar de ahorro voluntario complementario para todos los trabajadores que quieran complementar su pensión mediante depósitos a un fondo voluntario de pensiones.”
Un “pilar” aún por fundamentar cuya viabilidad y funcionalidad sería evaluada en el contexto de los pilares “básico solidario” y “contributivo”, una vez sustentados técnica y operativamente.
En la implementación de la reforma pensional se garantizan los derechos adquiridos por los afiliados del sistema pensional actual mediante la reglamentación de un “régimen de transición”. Se respetará las pensiones que establece el sistema pensional actual (“pensión de vejez, pensión de invalidez” y “pensión de sobrevivientes”). No se incrementa la edad de pensión de vejez. Se asume implícitamente que se respetará el derecho de los afiliados a las prestaciones económicas por incapacidad temporal, incluyendo el subsidio de maternidad.
Adicionalmente se implementarán mecanismos tendientes a corregir factores de inequidad y extender los beneficios del sistema pensional a diversos sectores de la población, como eliminar brechas que puedan existir entre hombres y mujeres, viabilizar una modalidad de aporte para las mujeres y personas sin remuneración que se dedican a labores de cuidado y generar alternativas de aporte para completar semanas faltantes para afiliados que llegan a la edad de vejez y no logran la cantidad mínima de semanas requerida para acceder a una “pensión básica”, una alternativa que se prioriza, no se impone, sobre la devolución de aportes.
En síntesis, la propuesta de Petro busca transformar el sistema pensional actual reorientando y fortaleciendo el “régimen de prima media” en función de ampliar la cobertura de la población protegida mediante prestaciones con niveles de reposición de ingresos que garanticen preservar condiciones de vida de los trabajadores en su etapa productiva y durante el retiro laboral. También generar condiciones para garantizar una “pensión solidaria” a todos los “adultos mayores” y el acceso a una “pensión básica” a sectores de la población sin remuneración salarial y/o sin posibilidades de generar ingresos en forma independiente.
La reorientación del “régimen de prima media” actual a un sistema de seguro colectivo de prima diferida de carácter social (sin ánimo de lucro) con beneficios definidos que cubra a toda la población de trabajadores aportantes basado en un esquema de “prima media” y la aplicación de técnicas actuariales para garantizar el pago de prestaciones y compromisos, incluyendo costos administrativos, puede garantizar bajo requisitos preestablecidos el acceso a “pensiones” que repongan en un grado o porcentaje predeterminado los últimos ingresos que el afiliado obtuvo en un periodo previo a la contingencia que ocasionó su retiro laboral. También podría generar recursos, vía transferencias de afiliados y pensionados, para alimentar fondos de solidaridad, destinados a financiar subsidios al aporte a pensión para trabajadores de bajos ingresos e incluso contribuir a financiar la “pensión solidaria” para el adulto mayor que trata el “pilar básico solidario”.
NOTAS
1. El Tiempo, “Hay que cuidar el ahorro pensional de los trabajadores: Asofondos”, septiembre 14 de 2022.
2. El Tiempo, “Pensiones futuras: las dudas si aportes se usan de inmediato en vez de ahorrarse”, septiembre 15 de 2022.
3. El Heraldo, “Reforma pensional: ¿cuáles son los peros a la propuesta de pilares?”, septiembre 9 de 2022.
* Investigador Social. (En buen uso de mi tiempo libre)
E-mail: javiercabrerarivera@yahoo.es
E-mail alternativo: appensionados@gmail.com
Octubre de 2022.